Los Pueblos de Moclín se encuentran coronados por el Castillo de Moclín, se construyó a mediados del siglo XIII para la defensa del Reino Nazarí de Granada. También llamado Hins Al–Muqlin (fortaleza de las dos pupilas), surgió como castillo fronterizo entre los reinos de Granada y Castilla y fue continuamente asediado durante el asentamiento hispano-musulmán, cayendo en manos de los Reyes Católicos en 1486.
La belleza, estructura y singularidad del Castillo es gracias a su situación estratégica dentro del sistema defensivo del Escudo de Granada. De planta irregular, adaptándose al terreno, se levanta en la cumbre más alta del entorno, a más de mil metros sobre el nivel del mar. Destacan en él dos zonas bien diferenciadas. La primera la constituyen las murallas exteriores, en algunos puntos haciendo la propia roca de función defensiva. Y desde donde se puede apreciar las diferentes torres vigías, el Castillo de la Mota, Sierra Elvira o la vega de Granada.
Por el Camino Real, se llega a la segunda zona del castillo, la alcazaba. En su puerta de entrada destaca la Torre del Homenaje, la más alta de todas. Está ubicada en el ángulo nordeste del castillo, dando vista a las tierras de Alcalá la Real. Dentro de la alcazaba, en la parte superior del castillo, destaca también el aljibe, de grandes dimensiones y de capital importancia en caso de asedio. En 1931 fue declarado monumento histórico-artístico y es Bien de Interés Cultural con la categoría de Monumento.
La red defensiva del castillo se completa con una serie de torres ópticas que controlaban los accesos a la villa-fortaleza. Actualmente permanecen en pie las siguientes: Torre atalaya de Mingoandrés, Torre atalaya de la Porqueriza, Atalaya de la Mesa, Torre atalaya de La Solana y Torre de la Gallina. El castillo de Moclín y sus torres atalayas conforman la corona de los Pueblos de Moclín, impresionado por su majestuosidad y esbeltez tanto a visitantes como paisanos.